Artículo Periodístico 628º: “Sobre la duda”[1].
0. Podemos definir la
duda como indecisión ante un concepto o idea o hecho o acto o acción o emoción
o persona. O indeterminación o suspensión del juicio ante varias ideas u
opiniones o hechos o datos o actos a realizar, tanto sea de uno mismo o sean de
los otros. Por tanto, tendríamos que reflexionar ¿cuánto es justo dudar, cuánto
y cómo y cuándo y en qué y con qué condiciones…? Es evidente que todos estos
temas y perspectivas no podemos rozarlos y analizarlos en un modesto artículo
periodístico, pero si algunas cuestiones o algunos flecos.
1. En este tema como en
todos los humanos a mi modesto entender y comprender las ciencias sociales
podrían y deberían aportar cada uno con su metodología y óptica su perspectiva
y sus dimensiones y posibilidades. Este tema como el resto de las cuestiones
humanas no solo pueden ser abordadas por las artes, especialmente literatura,
ni solo por la filosofía, ni solo por las opiniones generales o culturales de
cada época o tiempo o sociedad. Por lo cual:
- Tradicionalmente se ha
conceptualizado dos clases o tipos de duda, la duda escéptica, es decir, de la
escuela filosófica del escepticismo, que con todos los matices indica que el
ser humano no puede conocer con total seguridad nada o casi nada. Y en segundo
lugar, estaría la duda cartesiana o metodológica, que tiene su función de dudar
para alcanzar el mayor grado de verdad y certeza, se duda para alcanzar la
verdad entre distintas opiniones, datos, hechos, conceptos, realidades
posibles, explicaciones.
Por
supuesto en la vida común y general, los seres humanos, dudan y no dudan sobre
multitud de temas y cuestiones, sobre multitud de personas, incluida ella
misma. Dudar en algo o en mucho, en sus palabras o en sus actos, en su
veracidad o en su verdad o en su moralidad o en su comportamiento o en…
- Se puede pensar que la
duda, siempre que sea con ciertos límites, no llegue a extremos, que podríamos
denominarlos radicales o incluso patológicos, es necesaria para el correcto
autoconocimiento y heteroconocimiento de la realidad y de lo real teórico o
práctico.
- Observar, pensar,
dudar, volver a pensar y tomar una decisión sea conceptual, sea primero
conceptual y después práctica o de la acción.
- Toda duda surge por
sentir o creer que no se tienen suficientes conocimientos o conceptos para
interpretar los datos o hechos, o por sentir que no se tienen suficientes
hechos o datos para dar un juicio o veredicto o por ambas cosas a la vez.
- Quizás el sentido
común y la prudencia indica no ser demasiado crédulo, no ser demasiado
escéptico, ni un límite, ni otro, en general.
- El demasiado
intelectual puede caer siempre en el peligro de la eterna indecisión y eterna
duda, el demasiado imprudente suele tomar decisiones, teóricas o conceptuales,
o prácticas o de acción o afectivas o emocionales demasiado pronto.
- Uno es lo que cree ser
y lo que cree pensar y lo que cree dudar.
- Uno se define por lo
que cree o afirma y por lo que duda.
- No es lo mismo creer
en algo o dudar de ese algo o afirmar ese algo. Y existen multitud de temas o
cuestiones que son objeto de afirmación o negación o de duda.
- Cual es el término
medio de la duda y de la no duda, de la afirmación y de la negación y de la
duda de la afirmación o de la negación.
- Vivimos en un mundo en
el cual la mayoría de seres humanos creen que apenas creen en nada o en casi
nada, cuándo casi la mayoría creen en demasiadas cosas, o en un mundo que todo
el mundo cree que sus afirmaciones o sus negaciones sobre multitud de temas son
verídicas y verdaderas, cuándo una parte importante se muestran en el camino de
la duda…
- Se puede dudar sobre
una persona que no merece dudarse de ella o dudar de un concepto o idea o hecho
que no merece dudarse de él.
- Aléjate con prudencia
de las personas que sin razones suficientes crean dudas sobre realidades o
sobre otras personas.
- Para dudar seriamente
y con método tienes que examinar muchos pareceres sobre un tema o una cuestión.
- En muchos ambientes,
demasiadas veces, las personas más bondadosas y con mayor grado de verdad y
también con mayor moralidad, son tenidas como lo contrario.
- No solo examines la
supuesta certeza y evidencia de los argumentos que da una persona, sino la
persona en sí misma. Y viceversa.
- Aunque la persona que
emite un juicio no te guste, puede que sus argumentos y razones sean
verdaderos. Y puede que la persona que emita un enunciado tengas mucha empatía
y simpatía por ella y mucha amistad, pero los juicios y enunciados que produce
no son ciertos, ni verdaderos en ese tema o sobre esa persona.
- Al juzgar a una
persona, debes oír los distintos pareceres sobre este tema, y desde luego en un
juicio oír las dos o cinco partes que intervienen, los hechos, los argumentos,
las razones.
- En la vida cotidiana
se juzga, se sentencia y se condena a una persona sin oírla. O solo se oye a
algunas personas.
- Un espectáculo
enormemente triste es como la abundancia de bienes materiales y de cultura
hacen a las personas más inmorales en muchos sentidos, cuándo debería ser lo
contrario.
- Demasiadas personas
creen que conocen muy bien a otras personas, y solo conocen un barniz o una
capa de un centímetro. Al final, cuánto te conoces a ti de ti mismo.
- Examina si la duda que
tienes sobre un asunto o tema o cuestión se basa en el mundo irracional
(afectos, emociones, sentimientos, pasiones, instintos) o en el mundo racional
(inteligencia, memoria, percepciones, creatividad…) o en qué conjunto o
combinado de ambos.
- La familia es el gran
caldo y cultivo de emociones, a veces demasiadas emociones son no suficientes
argumentos o razones o basadas en hechos. Por lo cual, se puede adoptar ideas y
percepciones y concepciones sobre hechos o datos o sobre otras personas de forma
no correcta, sin haber oído todos los argumentos y todos los hechos y todos los
pareceres.
- Cuántas veces la
persona que ha sacrificado más en un asunto o en un trabajo o en una familia es
tenida como peor, se duda más de la persona con más bondad pero todos la tienen
como con menor bondad… Es una paradoja de la vida, que se produce en multitud
de entidades sociales humanas.
- La duda puede
combinarse con multitud de elementos o conceptos o ideas o enunciados o hechos
o aplicada a multitud de temas, ideologías, personas. Incluso a uno mismo de
forma no conveniente…
- La falta conveniente y
adecuada de autoestima es en definitiva, una duda no racional o no razonable…
Uno debe saber de lo que no sabe, pero también saber de lo que sabe, y saber de
lo que sabe en qué grado o en qué cantidad…
2. Uno tiene que
examinar muy bien, que es lo que cree y qué es lo que no cree, que es lo que
duda y qué es lo que no duda, tanto sean conceptos o sean actos o sean ideas o
sean emociones o sean sobre personas o sea sobre si mismo. Una duda racional o
razonable puede ser conveniente, una eterna duda o una duda radical o
exagerada, puede ser, de hecho es, generalmente mala o negativa…
http://filosliterarte.blogspot.com.es ©
jmm caminero (18 agosto-03 septiembre 2016 cr).
Fin artículo 628º:
“Sobre la duda”.
*
[1]
El Albacetense.es, 03 sept.
16. E. y P.
Galicia
Digital, 03 sept. 16. 09 sept. 16.
Noticanarias.com, 03 sept. 16. E. y P.