Las
ideologías seculares, que tanto marginan al cristianismo, deberían ser
prudentes, porque pueden venir otras religiones que no son el cristianismo…
Si
Europa, deja el cristianismo o lo minimiza, como el ser humano necesita lo
sagrado a Dios, los europeos se cambiarán a otras religiones…
El
Dios y las morales y los dogmas de todas las religiones-revelaciones positivas,
no son lo mismo. Por eso, sé prudente en qué Dios crees o dejas de creer.
¿Si
existe Dios, pues existe, oponerse a Él, no tiene sentido, si no existe, no
existe pues por tanto, oponerse a algo que no existe tanto, no tiene sentido?
¿Esta
obsesión por la negación y renegación de Dios, como existe en tantas mentes
hoy, es algo que quizás sea patológico, de alguna manera…?
Sin
llevar una vida teórica y moral y práctica y ética correcta y adecuada es más
difícil hacer el bien y ver la mano de Dios en el mundo…
¿Si
una sociedad o cultura o Estado o país reniegan de Dios, a nivel teórico o
práctico, esa sociedad se encamina al abismo, a sucesivas crisis en todo…?
¿El
ser humano, se tiene que valer de su razón y sus facultades psicomentales, pero
también se debe servir de lo sobrenatural de Dios, para actuar y pensar?
¿La
razón y la voluntad humana no es suficiente para alcanzar ciertos grados de
certeza y corrección moral, tanto teórica como práctica…?
Abdicar
de Dios, en mucho sentido es como dejar de ir en avión a París, y tener que ir
en mulo o en caballo.
Las
virtudes son algunas naturales, otras sobrenaturales, otras combinaciones de
ambas realidades. Pero si no creemos en lo sobrenatural estamos ciegos.
¿Sin
una moralidad correcta, sin una religiosidad-espiritualidad correcta, aceptada
por la inmensa mayoría de la población, un país va al desastre?
Dice
Juan de la Cruz, tanto ata para no volar, una cadena de hierro, como una cadena
de oro. Una razón de la crisis del cristianismo es esta razón.
Si
la sal se vuelve sosa, quién la salará…, y si se ha vuelto medio sosa, ni es
sal del todo, ni es sosa, sino medio sosa…
Uno
de los errores más graves de Hispania es la envidia negativa y perniciosa. Es
no alegrarse del bien del otro que ha conseguido según la ley y moralidad.
Somos
conscientes de las injusticias que nos hacen a nosotros, pero pocas veces, de
las injusticias que hacemos nosotros.
Uno, de los dramas-tragedias del ser
humano sentirse no querido, sentirse no amado, sentirse no estimado, sentirse
en soledad y en silencio…
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