Es
triste observar y padecer, que en los distintos ámbitos sociales, incluida la
familia en sentido amplio, tantas veces ocurre que personas con más bajo nivel
moral, son más valoradas que personas con más alto nivel moral y ético. ¿Cuando
ocurre esto es el final de una civilización?
No
digo que todos los cambios éticos y morales que se hayan producido sean
erróneos o no bondadoso o no útiles, pero creo que muchos si lo son. Lo peor de
todo, es que hemos caído en una enorme confusión, al bien le llamamos mal, y al
mal, muchas veces, bien.
De
todas formas vivimos y existimos en un tiempo de enorme inmoralidad,
amoralidad, antimoralidad, contramoralidad. Al menos la moralidad que se ha ido
diseñando durante siglos, desde la Grecia hasta hoy. Se ha dado una revolución
moral…
No
soy mejor que usted, pero en su fuero interno acépteme que quizás tampoco sea
peor que usted. No sé lo que yo habría hecho en sus circunstancias, ni usted en
las mías. Una cosa es juzgar en general y abstracto, y otra, condenar o salvar
a una persona concreta por sus actos.
No
entiendo, a tantas personas, que parecen como los aviones de guerra, o amigos o
enemigos. En la vida, nadie tiene la absoluta verdad, ni el absoluto error en
todo. Sino que hay gradaciones de verdad y de error.
El
tiempo me ha enseñado que hay demasiadas personas y colectivos, que claramente
engañan y manipulan a otras personas, su deseo es cambiar el mundo, según su
ideología. Y piensan raramente, que quizás los otros, también tengan algo de
verdad y de bondad y de racionalidad…
Estos
aforismos o ideas tienen la pretensión de que usted se haga nuevas preguntas y
nuevos argumentos. No que usted piense como yo, o como el otro, sino que usted
vaya avanzando en su capacidad de observar y pensar y analizar. Tenga en cuenta
que hay muchos embaucadores.
Estas
frases o adagios o aforismos, pueden que sean erróneos, por defecto o por
exceso, pero desde luego, intentar ser verosímiles, morales, verdaderos,
bondadosos. Es decir, auténticos. Aunque estén equivocados. No busco engañar o
manipular a usted.
A
veces, no por soberbia, sino quizás por tristeza o pena o desaliento, cuándo
mis escritos a nadie interesan, me digo, quizás para consolarme, quizás si
viviesen hoy Marco Aurelio, Epicteto, Montaigne, Cioran, Nietzsche, Dostoievski
y otros, estos aforismos les gustaría…
Ante
un tema o cuestión, no hay diez modos de realizar dicho acto, salvo alguna
excepción, sino existe uno o dos que son los más verdaderos. ¿O hay mil maneras
de explicar un hecho de la naturaleza…? ¿Y que todas sean verdaderas…?
No
creo en el relativismo, ni en el escepticismo, no se puede hacer cualquier cosa
de mil modos, y los mil modos ser igualmente válidos y verdaderos, sino que
existen, en cada tiempo, según el saber ortodoxo, modos y medios y formas más
correctas y otras más erróneas.
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