Artículo Periodístico 654º: “Duelo a garrotazos de Goya”[1].
0. A raíz de dicho
cuadro o fragmento de las pinturas negras debemos preguntarnos si estas
imágenes de alguna manera simbolizan en parte nuestra historia de estos dos
siglos, y si estamos a punto de caer otra vez en el mismo acontecer, ahora se
diría relato. Si en el fondo somos conscientes de que un sistema se
desequilibra, sea un sistema físico o social y que después volverlo a
equilibrar o armonizar puede costar muchos esfuerzos, trabajos, y a veces, muchos
más sacrificios. Debemos preguntarnos si dándonos cuenta o sin darnos estamos
yendo y cayendo y asomándonos al borde del precipicio.
1. El título de esta
obra ha sido diferente a lo largo de la historia: “Duelo a garrotazos”,
“Boyeros”, “Riña a garrotazos”, “Dos hombres riñendo a garrotazos”.
Y
el programa iconológico e iconográfico se ha discutido que aunque ahora parece
que están enterrados en arena, según algunas interpretaciones estaban sobre
hierba, pero el traslado de mural a lienzo se perdió diríamos parte de dicha
representación.
No
es casualidad, ni azar que Goya en su última etapa de su existencia hiciese
esta obra, además de su situación biográfica y de salud, además estaba la
situación de España, después de la Guerra contra los franceses, en parte contra
los franceses y en parte contra nosotros mismos, la situación política en el
país.
Pero
evidentemente en estas cientos de palabras, nos interesa el significado de esta
obra de arte en cuanto simboliza y ha sido casi siempre el problema entre
españoles. Esta es la interpretación unánime y simbólica de esta imagen.
Evidentemente para entenderla y comprenderla, habría que recordar o tener en la
memoria el resto de las famosas “pinturas negras”, los grabados sobre la
guerra, etc.
2.
¿La pregunta es por qué esta situación entre españoles? No podemos olvidar que
además del conflicto con los franceses y las derivaciones posteriores, no
podemos olvidar las guerras carlistas del siglo diecinueve, no podemos obviar
la incivil guerra civil de 1936.
¿Qué
es lo que nos pasa por dentro, qué es lo que nos pasa por fuera…?
¿Por
qué en vez de mirar hacia el futuro próximo y a medio plazo, todos unidos, de
la noche a la mañana, de vez en cuando, parece que volvemos a entrar y estar en
el borde del abismo…?
¿Por
qué ahora con cuatro enormes fuentes de conflictos en la sociedad y en el país,
en vez de todos intentar ponerse de acuerdo, por qué parece que se agravan esos
conflictos…?
No
somos conscientes que tenemos:
-
Un grave problema de financiación del Estado y con este un grave problema de
deuda o déficit del Estado.
- Tenemos una
crisis económica muy grave, con millones de personas en el paro o desempleo,
con una generación que pasan los años y no encuentran trabajo y no pueden organizar
un estilo de vida mínimo, crear y criar una familia, etc.,
-
Y encima un problema de secesión-división-fragmentación de la
sociedad-territorio-Estado en tres o cuatro Estados en la Península Ibérica, a
unos años vista.
-
Además soluciones sociopolíticas en el horizonte no moderadas, con una fuerza
suficiente para tomar el poder del Estado.
-
Y la interrelación y concatenación de todas esas problemas entre sí.
No
vamos a narrar las problemáticas exteriores, que ya hemos señalado en otras ocasiones
de una economía global enormemente competitiva, el problema del Mediterráneo en
multitud de factores, la cuestión del terror internacional, la dificultad de
vertebrar Europa como un Estado, la geopolítica-geoeconomía-geoestrategia
mundial y su inserción en ella de Europa y de España, etc.
Si
unimos todo el conjunto de factores y de niveles y de áreas podemos terminar en
una situación impredecible, incluso que no podemos imaginar en el momento de
ahora, porque aunque estamos mal o podemos pensar que lo estamos, podemos creer
que por muy mal que se ponga la cosa, no terminaremos como la imagen del
cuadro, sea en unos parámetros o sea en otros (a nivel político, a nivel
económico, a nivel de paz social, a nivel ideológico…). Es decir que la cuestión
se puede cronificar o incluso empeorar más o mejorar…
No
somos agoreros, no deseamos ningún tipo de violencia, pero debemos aceptar la
gran pregunta, si no somos conscientes que un sistema se puede desequilibrar un
poco o un mucho y que después volverlo a armonizar es muy difícil…
3.
¿Por qué hemos entrado en una nueva fase de “confrontación”, porque ésta es la
realidad…? ¿Por qué en el suelo de Celtiberia, hemos entrado en una nueva etapa
de no entendimiento, por qué no todas las fuerzas sociopolíticas, todas las
ideologías, todos los líderes, todos los territorios, toda la población no
llegan al consenso, a un pacto nacional y estatal, a unos nuevos pactos de la
Moncloa, a dejarse de experimentos sociopolíticos a gran escala de un color o
de otro, de secesión o de nuevas antiguas políticas, o de cualquier otro tema…?
¿Qué
nos pasa a los españoles, o a los que viven en estas tierras, que siempre
estamos en un enfrentamiento, o cada dos o tres generaciones, parece que
volvemos a las andadas, o podemos caer otra vez en la “riña a garrotazos”?
Viendo
y observando el panorama sociopolítico, sociocultural, socioideológico en estos
últimos meses y años, en estos últimos días y semanas, uno se pregunta,
acabaremos otra vez como en el cuadro de una manera o de otra…
Nos
preguntamos no podríamos reducir la tensión entre personas, líderes, entre el
pueblo, entre ideologías, entre territorios, entre colectivos y grupos, entre
banderas y darnos cuenta de la problemática esencial que existe, dejarnos de
experimentos sociopolíticos a gran escala, que nos pueden llevar literalmente
al hambre, a la violencia, a más desempleo, a no arreglar la situación
económica, al abismo-locura de una realidad social casi ingobernable…
Durante
generaciones todos los pensadores, escritores, intelectuales, filósofos y demás
oficios de la cultura y todo ser humano que respira bajo este sol se han
preguntado ¿qué nos pasa a los españoles por dentro y por fuera?
No
sé la respuesta, no sé si siglos en la Edad Media de conflicto interno
cultural-ideológico entre Reinos-Estados, no sé si siglos de Inquisición o
censura y de temor ideológico-cultural, no sé si siglos de intolerancia-envidia
colectiva-social han creado en el fondo del alma-mente-carne colectiva de los
que habitamos este territorio, una especie de desazón-angustia-sufrimiento
profundo que de vez en cuando emerge en diversos tipos de conflictos por una
supuesta razón o por otra. En vez de ver y percibir que las diferencias en la
unidad son buenas, nos enfrentamos constantemente por ideas o por territorios o
por bandos o por sistemas económicos o por…
4.
Para terminar solo queda una gran y grave pregunta ¿por qué no podemos ser como
los franceses o los alemanes, que saben que la unidad entre todo y todos, es lo
que les puede hacerles fuertes, los que les hace fuertes, y por qué los
sistemas ideológicos moderados de un lado y de otro, en un estado de urgencia, se ponen de acuerdo, en
el fondo y en la letra, por que ellos si son capaces de darse cuenta de estas
dos realidades, y por qué nosotros, no digo todos, pero una parte importante de
la población y de sus líderes-élites no somos conscientes y no nos damos cuenta
de ello?
¿Por
qué nos llenan de angustia-pena-sufrimiento y cada semana y cada mes, hay
alguna noticias o información que uno se pregunta, volveremos otra vez a
repetir otra vez la “riña a garrotazos”, sea de una forma o sea de otra, sea a
nivel económico o político o institucional o cultural o ideológico o…? ¿Somos
conscientes que hemos “entrado en la arena o en la hierba” y los contendientes
se están preparando para hacer realidad-materializar-cristalizar otra vez el
cuadro de Goya? ¡Qué país, qué paisaje, qué paisanaje como usted dijo señor
Unamuno…!
http://filosliterarte.blogspot.com.es ©
jmm caminero (10-14 octubre 2016 cr).
Fin artículo 654º:
“Duelo a garrotazos de Goya”.
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