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martes, 6 de agosto de 2024

Artículo Periodístico 654º: “Duelo a garrotazos de Goya”.

                         Artículo Periodístico 654º: “Duelo a garrotazos de Goya”[1].      

                        0. A raíz de dicho cuadro o fragmento de las pinturas negras debemos preguntarnos si estas imágenes de alguna manera simbolizan en parte nuestra historia de estos dos siglos, y si estamos a punto de caer otra vez en el mismo acontecer, ahora se diría relato. Si en el fondo somos conscientes de que un sistema se desequilibra, sea un sistema físico o social y que después volverlo a equilibrar o armonizar puede costar muchos esfuerzos, trabajos, y a veces, muchos más sacrificios. Debemos preguntarnos si dándonos cuenta o sin darnos estamos yendo y cayendo y asomándonos al borde del precipicio.

                        1. El título de esta obra ha sido diferente a lo largo de la historia: “Duelo a garrotazos”, “Boyeros”, “Riña a garrotazos”, “Dos hombres riñendo a garrotazos”.

                        Y el programa iconológico e iconográfico se ha discutido que aunque ahora parece que están enterrados en arena, según algunas interpretaciones estaban sobre hierba, pero el traslado de mural a lienzo se perdió diríamos parte de dicha representación.

                        No es casualidad, ni azar que Goya en su última etapa de su existencia hiciese esta obra, además de su situación biográfica y de salud, además estaba la situación de España, después de la Guerra contra los franceses, en parte contra los franceses y en parte contra nosotros mismos, la situación política en el país.

                        Pero evidentemente en estas cientos de palabras, nos interesa el significado de esta obra de arte en cuanto simboliza y ha sido casi siempre el problema entre españoles. Esta es la interpretación unánime y simbólica de esta imagen. Evidentemente para entenderla y comprenderla, habría que recordar o tener en la memoria el resto de las famosas “pinturas negras”, los grabados sobre la guerra, etc.

                        2. ¿La pregunta es por qué esta situación entre españoles? No podemos olvidar que además del conflicto con los franceses y las derivaciones posteriores, no podemos olvidar las guerras carlistas del siglo diecinueve, no podemos obviar la incivil guerra civil de 1936.

                        ¿Qué es lo que nos pasa por dentro, qué es lo que nos pasa por fuera…?

                        ¿Por qué en vez de mirar hacia el futuro próximo y a medio plazo, todos unidos, de la noche a la mañana, de vez en cuando, parece que volvemos a entrar y estar en el borde del abismo…?

                        ¿Por qué ahora con cuatro enormes fuentes de conflictos en la sociedad y en el país, en vez de todos intentar ponerse de acuerdo, por qué parece que se agravan esos conflictos…?

                        No somos conscientes que tenemos:

                        - Un grave problema de financiación del Estado y con este un grave problema de deuda o déficit del Estado.

                        - Tenemos una crisis económica muy grave, con millones de personas en el paro o desempleo, con una generación que pasan los años y no encuentran trabajo y no pueden organizar un estilo de vida mínimo, crear y criar una familia, etc.,

                        - Y encima un problema de secesión-división-fragmentación de la sociedad-territorio-Estado en tres o cuatro Estados en la Península Ibérica, a unos años vista.

                        - Además soluciones sociopolíticas en el horizonte no moderadas, con una fuerza suficiente para tomar el poder del Estado.

                        - Y la interrelación y concatenación de todas esas problemas entre sí.

                        No vamos a narrar las problemáticas exteriores, que ya hemos señalado en otras ocasiones de una economía global enormemente competitiva, el problema del Mediterráneo en multitud de factores, la cuestión del terror internacional, la dificultad de vertebrar Europa como un Estado, la geopolítica-geoeconomía-geoestrategia mundial y su inserción en ella de Europa y de España, etc.

                        Si unimos todo el conjunto de factores y de niveles y de áreas podemos terminar en una situación impredecible, incluso que no podemos imaginar en el momento de ahora, porque aunque estamos mal o podemos pensar que lo estamos, podemos creer que por muy mal que se ponga la cosa, no terminaremos como la imagen del cuadro, sea en unos parámetros o sea en otros (a nivel político, a nivel económico, a nivel de paz social, a nivel ideológico…). Es decir que la cuestión se puede cronificar o incluso empeorar más o mejorar…

                        No somos agoreros, no deseamos ningún tipo de violencia, pero debemos aceptar la gran pregunta, si no somos conscientes que un sistema se puede desequilibrar un poco o un mucho y que después volverlo a armonizar es muy difícil…

                        3. ¿Por qué hemos entrado en una nueva fase de “confrontación”, porque ésta es la realidad…? ¿Por qué en el suelo de Celtiberia, hemos entrado en una nueva etapa de no entendimiento, por qué no todas las fuerzas sociopolíticas, todas las ideologías, todos los líderes, todos los territorios, toda la población no llegan al consenso, a un pacto nacional y estatal, a unos nuevos pactos de la Moncloa, a dejarse de experimentos sociopolíticos a gran escala de un color o de otro, de secesión o de nuevas antiguas políticas, o de cualquier otro tema…?

                        ¿Qué nos pasa a los españoles, o a los que viven en estas tierras, que siempre estamos en un enfrentamiento, o cada dos o tres generaciones, parece que volvemos a las andadas, o podemos caer otra vez en la “riña a garrotazos”?

                        Viendo y observando el panorama sociopolítico, sociocultural, socioideológico en estos últimos meses y años, en estos últimos días y semanas, uno se pregunta, acabaremos otra vez como en el cuadro de una manera o de otra…

                        Nos preguntamos no podríamos reducir la tensión entre personas, líderes, entre el pueblo, entre ideologías, entre territorios, entre colectivos y grupos, entre banderas y darnos cuenta de la problemática esencial que existe, dejarnos de experimentos sociopolíticos a gran escala, que nos pueden llevar literalmente al hambre, a la violencia, a más desempleo, a no arreglar la situación económica, al abismo-locura de una realidad social casi ingobernable…

                        Durante generaciones todos los pensadores, escritores, intelectuales, filósofos y demás oficios de la cultura y todo ser humano que respira bajo este sol se han preguntado ¿qué nos pasa a los españoles por dentro y por fuera?

                        No sé la respuesta, no sé si siglos en la Edad Media de conflicto interno cultural-ideológico entre Reinos-Estados, no sé si siglos de Inquisición o censura y de temor ideológico-cultural, no sé si siglos de intolerancia-envidia colectiva-social han creado en el fondo del alma-mente-carne colectiva de los que habitamos este territorio, una especie de desazón-angustia-sufrimiento profundo que de vez en cuando emerge en diversos tipos de conflictos por una supuesta razón o por otra. En vez de ver y percibir que las diferencias en la unidad son buenas, nos enfrentamos constantemente por ideas o por territorios o por bandos o por sistemas económicos o por…

                        4. Para terminar solo queda una gran y grave pregunta ¿por qué no podemos ser como los franceses o los alemanes, que saben que la unidad entre todo y todos, es lo que les puede hacerles fuertes, los que les hace fuertes, y por qué los sistemas ideológicos moderados de un lado y de otro, en un  estado de urgencia, se ponen de acuerdo, en el fondo y en la letra, por que ellos si son capaces de darse cuenta de estas dos realidades, y por qué nosotros, no digo todos, pero una parte importante de la población y de sus líderes-élites no somos conscientes y no nos damos cuenta de ello?

                        ¿Por qué nos llenan de angustia-pena-sufrimiento y cada semana y cada mes, hay alguna noticias o información que uno se pregunta, volveremos otra vez a repetir otra vez la “riña a garrotazos”, sea de una forma o sea de otra, sea a nivel económico o político o institucional o cultural o ideológico o…? ¿Somos conscientes que hemos “entrado en la arena o en la hierba” y los contendientes se están preparando para hacer realidad-materializar-cristalizar otra vez el cuadro de Goya? ¡Qué país, qué paisaje, qué paisanaje como usted dijo señor Unamuno…!

                        http://filosliterarte.blogspot.com.es   © jmm caminero (10-14 octubre 2016 cr).

Fin artículo 654º: “Duelo a garrotazos de Goya”.

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[1] E. 14 octubre 2016 al Periodista Digital.com