Unos,
unos dicen ser de un color político, y lo votan, y se creen serlo, pero si
examinas su existencia y su vida, demasiadas veces son del contrario, del que
dicen que es el contrario…
No
me gusta, no me agrada que sistemáticamente se ataque a todos y cada uno de los
jefes de gobierno que han existido en España. Otra cosa es analizar actos e
ideas, razones y contrarazones, argumentos y contraargumentos… ¡Todo con
respeto…!
He
considerado siempre los artículos periodísticos como otro género literario,
igual que el teatro, la novela, la poesía, los aforismos o… Ciertamente, como
en todos, todo depende del autor y del tema y de las circunstancias. Y al
final, los demás juzgan y valoran y sentencian.
Pensamos-escribimos
para entender trozos de realidad. No para que recibamos homenajes de unos o de
otros.
Escribir
y leer y pensar son modos de vivir y existir la vida, semejantes a otros, pero
diferentes. Todos piensan y todos leen y todos escriben, pero algunos piensan y
leen y escriben más.
Siempre,
en todos los siglos, quieren que escribas, pintes, pienses como ellos quieran
que pienses y sientas y escribas y pintes. Siempre es lo mismo. Lo único que
van cambiando de los instructores y con
nuevas banderas.
Un
error moral puede conducir a un error biológico, y también a un error
psicológico. Es decir, una enfermedad moral o de corte moral espiritual puede
llevar a ese individuo a una enfermedad psicológica o psiquiátrica, y también
sanitaria o biomédica. Y viceversa…
Tantos
caminos he andado, que ya no sé cuál es mi camino.
No te engañes, en nombre de una idea
o un fin, no solo estás buscando ese fin, sino quizás estás utilizando esa meta
para tapar otros fines, o tapar otras heridas o traumas que llevas, o quizás
para olvidar algunas realidades personales. Por tanto, ten prudencia en lo que
buscas y sientes.
¿Existe
unos niveles tan bajos de moralidad correcta en la sociedad, que quizás peligra
la misma supervivencia social o de la sociedad, de las mismas culturas que
sustentan esas sociedades e incluso de los mismos Estados, desde luego de
muchos individuos y diversas entidades?
La
población no lee, menos piensa, vidas de santos y santas, y entonces, solo
percibe en el mundo y del mundo, personas que no son buenas o son malas, son
los ejemplos que vemos, durante décadas, y nunca nos acercamos a personas de
alto nivel moral y espiritual. Creemos que no existen.
Dice
#Mingote, que en docenas de años en el ABC, solo no le publicaron tres viñetas
humorísticas, y ahora, algunos periódicos digitales, a determinadas personas,
les dejan de publicar tres o cinco o siete artículos, no en el tiempo, sino
sucesivos, en dos meses…
Existen, o podrían
denominarse tres síndromes, el de Hamlet, el de Aníbal, el de Torquemada. Y me
temo que existen muchas personas en mi sociedad, que sufre uno o varias
combinaciones de esos tres. Y eso, eso no les hacen vivir, no les permiten
vivir, pero no dejan vivir a los demás. El de Hamlet, es que tienen tanto
rencor y odio hacia unas personas de unas ideologías y otras, y quieren
vengarse. El de Torquemada, que tienen que tapar que vienen de una ideología y
otra, y entonces no dejan de vivir a los demás, porque tienen que demostrar que
son los “cristianos viejos y más antiguos que existen”, cuándo son lo que son o
vienen de donde vienen. Y lo de Aníbal, que ha jurado delante de su padre, el
odio eterno a los romanos, claro está que ahora los romanos son los de un grupo
social o una supuesta ideología o la de otra… ¡Y así, no se puede montar la
riqueza y la paz en un país, ni el progreso, así nos llevará al enfrentamiento
o a graves crisis…!
¿A nadie se desea, quiere, necesita ofender...!
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