Si
no entendemos y comprendemos que el hombre es bueno, pero también es malo, no
entenderemos y no comprenderemos al ser humano, ni su historia, ni lo que hace,
ni lo que puede hacer.
Creo que el concepto de
banalidad del mal de Arendt, interpretado de muchas maneras, hay que
entenderlo, que “el ser humano común en circunstancias especiales, dentro de un
orden es capaz de hacer más cosas buenas o malas, más de las que esperamos”. No
podemos, en segundo lugar, negar, que existe un uno por ciento de psicópatas en
la sociedad, unos parecen integrados y otros no. Y, si estos encuentran la
situación, pues se encarnan y entonces, nos damos cuenta, si es que lo hacemos
que dentro de nuestra sociedad, existen individuos, que son capaces de hacer
tal cosa u otra. Posiblemente, si la ocasión o circunstancia o el poder
sociopolítico lo permite…
¿Los rostros de Rafael
en la Escuela de Atenas podrían
representar a personas reales de su época, al menos, la mitad?
Como en el futbol, hay
equipos de primera y de quinta, en todas las áreas culturas, hay autores
considerados de primera y de quinta y de décima, que en el actual sistema
cultural no existen…
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